Tercer Dr. Gemelo

Pero siempre estan las puertas abiertas,
al estar el segundero ya.
Sólo faltaba la hora clave para una ventana.
No, se fue de su lado ya.

Pero el exerior es súmamente peligroso,
para hablar y contar todo.
En la cárcel monótona te sentías glorioso.
Es un nuevo comienzo.

Para el tercer Dr. Gemelo,
quien pasa la voz de lo sucedido.
Nos menciona repetidas onomatopeyas
y no permite que nos olvidemos de ellas.

Pero esta es la conclusión
de una simple vieja,
quien mira por la ventana con obsesion,
y que todo lo tiene en cuenta...

Seguro que no se esperaba
de esta bienvenida.
Pues necesitamos las novedades
para que la tercera aguja nos repita.

Pero el exterior es súmamente peligroso...
.
...
..............
...
.

Sin Palabras de Dos

En un suspiro, dice
"quiero que se acerquen
a éste foco de neón,
es sólo quien bendice
nuestra presencia..."

Quién hubiera imaginado...

Cerca de éste foco
se nos ilumina la cabeza,
y como si fuera poco
vivimos la realidad sin creteza.

No se qué decir...

Presente en todo lo que no excluye
presente en mis 19 años...
compañero de la Mantícora
(...casi su hermano...)

En todo momento hubo, hay y habrá mucha luz. Un rayo alcanza hasta lo más lejos, y con muchos espejos lo hace casi infinito. Ésta poesía está dedicada al amigo y hermano de mi viejo, Jo L. Romero, quien nos acompaña siempre, aun desde 400 kilómetros y mas todavía. Gracias Jo por todo..

Mientras se ahoga, sangra
en una piedra blanca
tornándola translúcida,
para mostrarse lúcida
ante los ojos de la parca.

Le toma de las manos
y la lleva al cielo,
donde el ambiente también es cálido
y perece el ego.

Mientras tanto...yo...
yo me pregunto si es dulce...
a nadie le gusta la contrariedad.

Los ojos se dirigen como flechas,
a su triste destino.

Y así terminar vacío.

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-- O --
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Luego de tanto tiempo sin hacer ésto se me ocurrió por fin algo. Las memorias siguen en blanco, apagada de matices, hasta lo nuevo.