Ante esto.
Historias de los días de escarcha,
de entumecidos dedos
y verdes pastos,
de azul y naranja
y langostas en los focos.
Angostas cintas de una cuadra
y dos de ancho,
que de punta a punta
recorro los días de azul o purpúreo cielo,
maestro de sombras, maestro de focos.
Fugaz entre el día
hacia la cuenca del sol,
para poder volver a la azotea.
Cuando ni siquiera he empezado,
y la electricidad patea mi mente, mi corazón.
Me produce una triste sensación...
Mercurio, metal líquido
que desliza de mis dedos
al tratar de alcanzarlo,
se ve muy bien.
Aunque es tóxico.
Luego de un trago de (Hg),
me parecería lo mismo,
pero sin los pájaros del tiempo
que yo les conocía el rostro
va a ser un nuevo comenzar.
Sí, nuevos pájaros
que no le llegan ni a los talones a los primeros.
Que solo me quedan a la distancia,
me alivia saber eso,
de que reviven, y reviven.
¿Pero me recordarán en las cintas
que de punta a punta recorría?
¿De qué color se tornarán mis días?
Trato de tomar Mercurio (Hg)
pero se me resbala de los dedos.
Y no sabré qué pasará hasta que lo haga.
Historias de los días de escarcha,
de entumecidos dedos
y verdes pastos,
de azul y naranja
y langostas en los focos.
Angostas cintas de una cuadra
y dos de ancho,
que de punta a punta
recorro los días de azul o purpúreo cielo,
maestro de sombras, maestro de focos.
Fugaz entre el día
hacia la cuenca del sol,
para poder volver a la azotea.
Cuando ni siquiera he empezado,
y la electricidad patea mi mente, mi corazón.
Me produce una triste sensación...
Mercurio, metal líquido
que desliza de mis dedos
al tratar de alcanzarlo,
se ve muy bien.
Aunque es tóxico.
Luego de un trago de (Hg),
me parecería lo mismo,
pero sin los pájaros del tiempo
que yo les conocía el rostro
va a ser un nuevo comenzar.
Sí, nuevos pájaros
que no le llegan ni a los talones a los primeros.
Que solo me quedan a la distancia,
me alivia saber eso,
de que reviven, y reviven.
¿Pero me recordarán en las cintas
que de punta a punta recorría?
¿De qué color se tornarán mis días?
Trato de tomar Mercurio (Hg)
pero se me resbala de los dedos.
Y no sabré qué pasará hasta que lo haga.
Por supuesto que NI EN PEDO me tomo ni una gota de mercurio, es algo metafórico que tiene que ver con nerviosos pensamientos de lo que irá a pasar (que vaya a saber si pasarán), por suerte siempre se me deslizan como el propio mercurio y, al ser nerviosos son dañinos (tóxicos).
La ilustración es una foto de la plazoleta que siempre se ir, así que entre todas las idas le tomé una foto.
La ilustración es una foto de la plazoleta que siempre se ir, así que entre todas las idas le tomé una foto.
2 comentarios:
Hola sé que lo cambiaste al blogg hace tiempo, solo que yo no estaba en condiciones de escribirte.Una vez más admiro el don que Dios puso en tus manos y en tu corazón.Muy bello, no hace falta que aclares lo que escribes, son pensamientos tuyos, que cada uno lo interprete como quiera, no te parece????.Insisto tu blogg tiene doble valor por el arte genuino y por tus pensamientos muy maduros para alguien de tu edad.Felicitaciones
Los pájaros,sean viejos o nuevos,jamás se olvidan de tí.Es más,ya has comprobado cómo delatan tu presencia.Puede cambiar el escenario,pero mientras tu bohemia te lleve a imaginar maravillas como las que nos ofreces (y seguramente nos ofrecerás),sigue caminando,allí nomás hay otra plazoleta,está todo bien...
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